Río Bec
Entre nobles campesinos y reyes “invisibles”
Por Eva LEMONNIER
Desde el inicio, con Merwin (1913), quién fue el primero en notar el patrón de asentamiento atípico de la región Río Bec, se plantea la interrogante sobre cómo se organizaban las sociedades que antes habitaron esta zona. En comparación con los sitios de las tierras bajas centrales, no se conocen en la región (con la excepción de Becan) centros claros con plazas públicas –de los que hoy se visitan– en torno a las cuales se habría agregada/concentrada una población. Al contrario, lo que domina son numerosos grupos de arquitectura monumental dispersos.
Los barrios de Río Bec en su parte central, alrededor de los Grupos A, B y D (M.C. Arnauld, © Proyecto Río Bec 1)
Un sitio arqueológico de las tierras bajas mayas que parece sin limites
En Río Bec mismo, trabajos de reconocimientos y de excavaciones han revelado una red continua y bastante regular de casas sobre los 79.4 km2 mapeados por tecnología LiDAR –o sea un “asentamiento” que a primera vista parece no tener límites, tampoco centro. Estas casas –hoy mayormente montículos de tierra y/o de piedras en el entorno selvático– a veces se organizaban por grupos, en los cuales siempre resalta al menos un edificio mayor, de estilo Río Bec (con fachadas adornadas), que representa la residencia de una familia poderosa. Las demás eran pequeñas viviendas mamposteadas (a veces abovedadas), o hechas de materiales perecederos, albergando a familias de rango inferior. En ningún caso estuvieron aisladas: en su entorno circundante, las rodeaban varios acondicionamientos agrícolas. También, análisis espaciales, tomando en cuenta rasgos geográficos como pantanos estacionales, destacan una organización en barrios dominados por uno o dos grupos monumentales.
En la selva, algunos edificios aún conservan in situ varios elementos arquitectónicos e iconográficos (Grupo Thompson: fachada trasera de la Estructura 1 –Ph. Nondédéo, © Proyecto Río Bec I) .
¿Un sitio con características similares al resto del mundo maya clásico?
En este paisaje, de residencias y parcelas, es difícil jerarquizar los grupos monumentales entre sí, mientras existe un fuerte contraste entre casas grandes y pequeñas. No obstante, se distinguen tres grupos, Kajtun, el Grupo II y el Grupo V. Son los únicos que tienen estelas (algunas con inscripciones), plazas y templos. Estos elementos son diagnósticos de los centros político-religiosos característicos del sistema de ciudades-estados dominadas por reyes sagrados, que prevaleció en el resto del mundo maya clásico (250-950 d.C.). La cuestión de la organización socio-política en el sitio de Río Bec sigue desafiando los arqueólogos, puesto que en el estado actual del conocimiento, no se puede con certeza concluir a la ausencia de centros públicos controlados por reyes ni pensar en una sociedad esencialmente dominada por familias de alto rango. Es el reto que el Proyecto Río Bec, en una segunda fase, enfrenta.
Estela 6, Gr. V (fecha: 795 d.C.)
Para saber más:
Michelet, Dominique 2014 Río Bec. Lecciones de un lugar aparte. En Las Grandes Ciudades Mayas de Campeche. Homenaje a Román Piña Chán, 162–87. Madrid: Gobierno del Estado de Campeche / Pámpano servicios editoriales / Turner Publicaciones.
Nondédéo, Philippe 2004 ¿Existe el sitio de Río Bec? Nuevos datos sobre el patrón de asentamiento de esta zona arqueológica, XII Encuentro Internacional “Los Investigadores de la Cultura Maya”, vol. 1, pp. 54-67, Universidad Autónoma de Campeche.
Philippe Nondédéo, M. Charlotte Arnauld y Dominique Michelet 2013 Río Bec Settlement Patterns and Local Sociopolitical Organization. Ancient Mesoamerica, 24-2: 373-396.
Desde el inicio, con Merwin (1913), quién fue el primero en notar el patrón de asentamiento atípico de la región Río Bec, se plantea la interrogante sobre cómo se organizaban las sociedades que antes habitaron esta zona. En comparación con los sitios de las tierras bajas centrales, no se conocen en la región (con la excepción de Becan) centros claros con plazas públicas –de los que hoy se visitan– en torno a las cuales se habría agregada/concentrada una población. Al contrario, lo que domina son numerosos grupos de arquitectura monumental dispersos.
Los barrios de Río Bec en su parte central, alrededor de los Grupos A, B y D (M.C. Arnauld, © Proyecto Río Bec 1)
Un sitio arqueológico de las tierras bajas mayas que parece sin limites
En Río Bec mismo, trabajos de reconocimientos y de excavaciones han revelado una red continua y bastante regular de casas sobre los 79.4 km2 mapeados por tecnología LiDAR –o sea un “asentamiento” que a primera vista parece no tener límites, tampoco centro. Estas casas –hoy mayormente montículos de tierra y/o de piedras en el entorno selvático– a veces se organizaban por grupos, en los cuales siempre resalta al menos un edificio mayor, de estilo Río Bec (con fachadas adornadas), que representa la residencia de una familia poderosa. Las demás eran pequeñas viviendas mamposteadas (a veces abovedadas), o hechas de materiales perecederos, albergando a familias de rango inferior. En ningún caso estuvieron aisladas: en su entorno circundante, las rodeaban varios acondicionamientos agrícolas. También, análisis espaciales, tomando en cuenta rasgos geográficos como pantanos estacionales, destacan una organización en barrios dominados por uno o dos grupos monumentales.
En la selva, algunos edificios aún conservan in situ varios elementos arquitectónicos e iconográficos (Grupo Thompson: fachada trasera de la Estructura 1 –Ph. Nondédéo, © Proyecto Río Bec I) .
¿Un sitio con características similares al resto del mundo maya clásico?
En este paisaje, de residencias y parcelas, es difícil jerarquizar los grupos monumentales entre sí, mientras existe un fuerte contraste entre casas grandes y pequeñas. No obstante, se distinguen tres grupos, Kajtun, el Grupo II y el Grupo V. Son los únicos que tienen estelas (algunas con inscripciones), plazas y templos. Estos elementos son diagnósticos de los centros político-religiosos característicos del sistema de ciudades-estados dominadas por reyes sagrados, que prevaleció en el resto del mundo maya clásico (250-950 d.C.). La cuestión de la organización socio-política en el sitio de Río Bec sigue desafiando los arqueólogos, puesto que en el estado actual del conocimiento, no se puede con certeza concluir a la ausencia de centros públicos controlados por reyes ni pensar en una sociedad esencialmente dominada por familias de alto rango. Es el reto que el Proyecto Río Bec, en una segunda fase, enfrenta.
Estela 6, Gr. V (fecha: 795 d.C.)
Para saber más:
Michelet, Dominique 2014 Río Bec. Lecciones de un lugar aparte. En Las Grandes Ciudades Mayas de Campeche. Homenaje a Román Piña Chán, 162–87. Madrid: Gobierno del Estado de Campeche / Pámpano servicios editoriales / Turner Publicaciones.
Nondédéo, Philippe 2004 ¿Existe el sitio de Río Bec? Nuevos datos sobre el patrón de asentamiento de esta zona arqueológica, XII Encuentro Internacional “Los Investigadores de la Cultura Maya”, vol. 1, pp. 54-67, Universidad Autónoma de Campeche.
Philippe Nondédéo, M. Charlotte Arnauld y Dominique Michelet 2013 Río Bec Settlement Patterns and Local Sociopolitical Organization. Ancient Mesoamerica, 24-2: 373-396.